martes, 15 de mayo de 2012

TEXTOS CIENTÍFICOS



Sección a cargo de: Sanjuana Román Román


Aristóteles filósofo griego (Atenas, 427 - 347 a. C.)

En esta ocasión los invitamos a participar en el análisis del texto " Las características de los jóvenes según Aristóteles"Como Uds. saben la escritura es una de las características que distinguen al hombre de los demás seres vivos y es a través  ella, que hemos avanzado como humanidad, pues al escribir plasmamos nuestras ideas, pensamientos e inquietudes con respecto a todo lo que nos rodea y acontece.
Les presentamos el texto escrito por Aristóteles este gran filósofo griego y los invitamos a que participen en la lectura y  análisis del mismo.

Las características de los jóvenes según Aristóteles

Los jóvenes son, por carácter, concupiscente y decididos a hacer cuanto puedan apetecer. Y en cuanto a los apetitos corporales son, sobre todo, seguidores de los placeres del amor e incontinentes en ellos. También son fácilmente variables y en seguida se cansan de sus placeres, y los apetecen con violencia, pero también se calman rápidamente; sus caprichos son violentos, pero no grandes, como, por ejemplo, el hambre y la sed en los que están enfermos. También son los jóvenes apasionados y de genio vivo y capaces de dejarse llevar por sus impulsos, y son dominados por la ira, ya que por punto de honra no aguantan ser despreciados, antes se enojan si se creen objeto de injusticia. Y aman el prestigio, pero más aún el vencer, porque la juventud tiene apetito de excelencia, y la victoria es una superación de algo. Y son más estas cosas que no codiciosos, y son menos avariciosos porque aún no han experimentado la indigencia (…).

Y no son mal intencionados, sino ingenuos, todavía no han sido testigos de muchas maldades. Y son crédulos, porque todavía no han sido engañados en muchas cosas. Y están llenos de esperanza, porque, de manera semejante a los alcohólicos, los jóvenes están calientes por la naturaleza y al mismo tiempo porque aún no han sufrido desengaños en muchas cosas. Y así viven la mayoría de las cosas con la esperanza; porque la esperanza mira a lo que es el futuro, mientras que el recuerdo mira al pasado y para los jóvenes lo futuro es mucho y lo pretérito breve; ya que el primer día de nada puede acordarse y, en cambio, pueden esperarlo todo. Y son fáciles de engañar, por lo dicho, porque esperan fácilmente. Y son bastante animosos porque están llenos de decisión y de esperanza, de lo cual uno les hace ser audaces, porque ninguno teme cuando está enojado, y el esperar algún bien es algo que inspira resolución. También son vergonzosos, porque aún no sospechan la existencia de otros bienes, antes han sido educados solamente por la ley de lo convencional. Y son magnánimos, porque aún no han sido humillados por la vida, antes son inexpertos en las cosas necesarias, y la magnanimidad consiste en estimarse, y esto es propio del que tiene esperanza.

Y prefieren realizar las cosas que son hermosas  que las que son convenientes, porque viven más según su manera de ser que según la razón, y la razón calculadora se nutre de lo conveniente; la virtud, en cambio, de lo bello. Y son más amantes de los amigos y compañeros que los de otras edades, porque gozan con la convivencia y porque todavía no juzgan nada de cara a la utilidad y el lucro, así tampoco a los amigos.

Y en todas estas cosas pecan por exceso y por la violencia contra el dicho de Quilón, ya que todo lo hacen en exceso: aman demasiado y odian demasiado, y todo lo demás de semejante manera. Y cometen las injusticias por insolencia, pero no por maldad.

Y son compasivos, por suponer a todos virtuosos y mejores, ya que miden a los que están cerca de ellos según su propia falta de maldad, de manera que se supone que éstos padecen cosas inmerecidas. También son amantes de la risa, y por eso también son propensos a la burla, porque la mofa es una insolencia educada.

Así pues, tal es el carácter de los jóvenes.
 (Aristóteles, Retórica, Libro II. Capítulo 12.
Citado por Delval, 1994, p. 547)

Ø  Que tan certero es el juicio de Aristóteles ( 384-322 a. C) aplicado a los jóvenes de hoy? Coméntalo con tus compañeros y personas mayores.



No hay comentarios:

Publicar un comentario